
Dios estaba con él, y si ese pequeño niño hizo eso y le funcionó, por qué nosotros queremos enfrentar a nuestros gigantes solos?
Queremos enfrentar solos nuestros miedos, temores, dudas, enfermedades, pérdidas, etc. Identifica cuál es tu gigante que te quiere robar la paz, y lo más importante...
No lo enfrentes solo! Dios quiere acompañarte y así podrás tener éxito.
Que tengas un día Bendecido!
No hay comentarios:
Publicar un comentario